OPINION: Juez abusó de dos viejos enfermos para robarles su tierra

POR PRAEDE OLIVERO FÉLIZ 

Hay cosas y casos que lloran ante la presencia de Dios y lo que les ha hecho el Juez Manuel Emilio González a los viejitos enfermos Evangelista (f), Eleodora Sierra de Román y su familia, es uno de esos casos. 

Evangelista enfermo, con un derrame cerebral, con afecciones psicomotoras y del habla fue levantado de su lecho por el juez para colocar sus huellas dactilares en un papel, en la galería de su casa, lo mismo hizo con Eleodora, la que no sabe leer, ni escribir, a la vez que puso a firmar a sus hijos Gerineldo, quien es sordo y a Venancia, quien es minusválida, la que preguntó qué era eso, respondiendo el Juez González, que era un recibo de los chelitos que le daba a la vieja de la producción de la parcela que le administraba durante varios años. Este hecho se produjo en presencia del niño Antony Carvajal, quien ha contado el abuso. 

Cuando el Juez González dejó de darle a la vieja su parte de la producción de plátano, guineo, coco y otros rubros agrícolas, le reclamaron y este dijo que él le había comprado, lo que desató la protesta y la denuncia, ya que nunca habían hablado de compra, ni de venta del terreno y la familia nunca recibió dinero de la supuesta venta, que nunca existió. Dijeron que de recibir ese dinero la pulpería de los viejos no hubiese cerrado por quiebra y los hijos no les hubiesen enviado dinero para mantenerse. 

Se olvidó ese bárbaro que Balaguer entregó esa parcela a los viejos, que es un bien de familia, que el título dice intransferible y que los documentos que ha falsificado para robarle la tierra a la familia Román Sierra lo llevarán a la destitución y a la cárcel. 

La suerte de la venta será la nulidad y la familia recuperará su tierra, si hay justicia, si se aplica la ley, si la inmoralidad, la corrupción y la impunidad no se sigue imponiendo en el caso del robo de la tierra de dos viejitos enfermos por parte del Juez González.

“Y conoceréis la verdad y la verdad os hará